“Bullying” o acoso escolar, se duplicó en pandemia
En el último año se duplicó y hoy aqueja más de 12.000 niñas, niños y adolescentes por año, según el último informe desarrollado por la ONG Internacional“Bullying Sin Fronteras”.
En los últimos dias el suicidio del niño , Drayke Hardman de solo 12 años que se quitó la vida tras sufrir bullying por más de un año en su colegio en Utah, Estados Unidos, instaló el debate en los medios y en las familias. ¿Cómo abordarlo?
El bullying o acoso escolar es un concepto que engloba cualquier tipo de agresión constante de un niño/a o varios hacia otro/a. Las mismas pueden ser físicas o psicológicas, y se caracterizan por sostenerse en el tiempo de forma permanente y duradera, y dejar en la víctima huellas emocionales difíciles de sobrellevar. En su mayoría, los casos de bullying se dan desde sexto grado a quinto año del secundario.
Fundación SanCor Salud da a conocer una serie de recomendaciones para concientizar y prevenir esta problemática que en el último año se duplicó
¿Cuáles son los signos de alerta?
Los adultos responsables deben estar atentos a los signos de alerta que pueden indicar la existencia de este tipo de situaciones en los marcos sociales de los niños.
Signos de alerta en las víctimas:
¿Cuáles son los signos de alerta?
● Cambios llamativos de comportamiento o humor. Contestan mal, se muestran ansiosos,
sensibles e irritables. No quieren ir a la escuela, dejan de comunicarse en el hogar o
responden con evasivas. Puede ocurrir que el rendimiento escolar baje abruptamente.
● Signos físicos. Presentan golpes, rasguños, moretones o arañazos.
● Síntomas psicosomáticos. Suelen manifestar dolores de panza, cabeza, mareos, diarrea,
temblores, palpitaciones, tartamudeo, cambios en la alimentación y en el sueño (insomnio,
pesadillas).
● Piden dinero a sus padres o comienzan a robarlo para dárselo al acosador.
● En casos muy graves, presentan ideas escapistas o de muerte.
Signos de alerta en el agresor:
● Falta de empatía. No son sensibles ante el sufrimiento de otras personas o animales.
● Son manipuladores, prepotentes o tienen afán de protagonismo y reaccionan con
indiferencia cuando se los castiga.
● Poseen poca tolerancia a la frustración.
● Tienen baja autoestima, y por eso se contentan con someter a otras personas.
● En cuanto a las conductas familiares, suelen recibir una educación muy permisiva, con falta
de límites y padres poco presentes.
¿Cómo actuar?
El Ministerio de Educación de la Nación
puso a disposición una línea telefónica gratuita “Convivencia Escolar” (0800-222-1197)
En caso de detectar un posible caso de bullying, la intervención es fundamental, para actuar antes de que el/la niño/a presente secuelas y un estrés postraumático. Según los especialistas, los adultos deben creer en las palabras de sus hijos/as y acompañarlos sin culpar a la víctima ni quitarle importancia al hecho. Dejar de naturalizar la violencia y creer que el acoso “te hace más fuerte”.
Para hacerle frente a esta problemática, es necesario que los adultos soliciten la asistencia psicológica de profesionales especialistas en la materia. El Ministerio de Educación de la Nación puso a disposición una línea telefónica gratuita “Convivencia Escolar” (0800-222-1197) para orientar a padres, docentes o cualquier persona que detecte un caso de bullying.
Para conocer más sobre este tema, se puede ingresar al Instagram de la Fundación https://www.instagram.com/fundacion.sancor.salud/ donde se publica información de interés relacionada a Salud y Educación,