COP16 I Inteligencia Artificial y Cambio Climático: Dos Retos Globales
La COP16 en Cali, Colombia, reúne a 196 países para abordar el cambio climático y la inteligencia artificial (IA) como prioridades globales. Del 21 de octubre al 1 de noviembre, líderes y expertos buscan frenar la pérdida de biodiversidad y debatir el impacto ambiental de la IA, cuyo alto consumo energético genera preocupación. Iniciativas como el Proyecto Guacamaya, que utiliza IA para monitorear la Amazonía, y el Marco Global de Biodiversidad Kunming-Montreal son claves en la agenda de este año
- Cambio climático y biodiversidad: La COP16 refuerza el compromiso mundial con la conservación de ecosistemas esenciales para la resiliencia climática.
- Impacto de la IA: Aunque la inteligencia artificial aporta soluciones innovadoras, su alto consumo energético representa un reto para la sostenibilidad.
La COP16, celebrada en Cali entre el 21 de octubre y el 1 de noviembre de 2024, convoca a 196 países con el objetivo de frenar la pérdida de biodiversidad y abordar los desafíos ambientales y tecnológicos que amenazan el equilibrio planetario. Este año, la conferencia de biodiversidad ha puesto de relieve dos temas fundamentales: la conservación de los ecosistemas y el papel de la inteligencia artificial (IA), una tecnología que, a pesar de sus avances, genera inquietud por su huella ecológica y su consumo energético. Cali se convierte así en epicentro de un debate que reúne a líderes, científicos y activistas para buscar soluciones prácticas y sostenibles.
IA: ¿Un aliado para la biodiversidad o un riesgo ambiental?
La inteligencia artificial ha emergido como una herramienta poderosa en la lucha contra la crisis climática, y uno de sus mayores exponentes es el Proyecto Guacamaya. Liderado por Microsoft junto con la Universidad de los Andes, el Instituto Sinchi y el Instituto Humboldt, esta iniciativa utiliza modelos de IA para monitorear la deforestación en la Amazonía, combinando imágenes satelitales, cámaras trampa y tecnología bioacústica. Este enfoque permite un seguimiento detallado de los cambios en el ecosistema y de la fauna en la selva amazónica, un sistema vital para la biodiversidad.
“Queremos que esta tecnología esté al alcance de todos los investigadores en el mundo, y así convertirla en una herramienta global para la conservación”, explica Juan Lavista, director del AI for Good Lab de Microsoft. La IA analiza miles de imágenes capturadas por cámaras trampa en el Amazonas, detectando la presencia de animales y clasificando especies. En su vertiente bioacústica, esta tecnología identifica los sonidos de distintas especies, proporcionando datos en tiempo real que son vitales para la toma de decisiones en la conservación.
A pesar de su utilidad, la IA también plantea desafíos ambientales. Un estudio de la Universidad de Massachusetts en Amherst advierte que entrenar un solo modelo de IA puede generar hasta 284.000 kg de CO₂, un impacto cinco veces mayor que el de un automóvil a lo largo de toda su vida útil. Esta preocupación ha llevado a expertos a sugerir que el uso de energías renovables es imprescindible para reducir la huella de carbono de estos sistemas.
Cambio climático y biodiversidad: Colombia como líder en la conservación
La COP16 no solo centra sus esfuerzos en la tecnología, sino también en el compromiso con la conservación y la lucha contra el cambio climático. El Marco Global de Biodiversidad Kunming-Montreal, aprobado en la COP15 de 2022, establece objetivos claros para el 2030, como la conservación del 30% de las áreas terrestres y marinas y la restauración del 20% de los ecosistemas degradados. Estos objetivos buscan no solo proteger la biodiversidad, sino también fortalecer la resiliencia climática de las comunidades ante fenómenos extremos.
Durante la apertura del evento, António Guterres, secretario general de la ONU, lanzó un llamado urgente a los países para que actúen con determinación: “No estamos en el camino correcto. Debemos pasar de las palabras a los hechos concretos para restaurar nuestra relación con el planeta. La destrucción de la naturaleza no solo es una tragedia ecológica, sino también un riesgo para la estabilidad económica y social”.
El marco Kunming-Montreal y las estrategias presentadas en la COP16 buscan restaurar ecosistemas esenciales como humedales y manglares, que son barreras naturales contra inundaciones y tormentas. Al proteger estos espacios, no solo se preserva la biodiversidad, sino que se generan beneficios directos para las comunidades locales, que dependen de estos ecosistemas para su sustento y protección.
COP16: Una plataforma crucial para América Latina
La COP16 en Cali representa una oportunidad única para que América Latina reafirme su liderazgo en la conservación ambiental. Con la COP30 de Cambio Climático programada para 2025 en Brasil, la región se convierte en una referencia global en la lucha contra la pérdida de biodiversidad y el cambio climático. El evento, que se realiza bajo el lema “Paz con la Naturaleza”, reafirma el compromiso de los países latinoamericanos con un desarrollo sostenible, en el que la tecnología y la conservación deben alinearse.
En palabras de Lavista, el objetivo es “reducir el impacto” de la IA, promoviendo que “la energía que se utiliza provenga de fuentes renovables”. Expertos como Samuel Thomas, de la firma Schroders, señalan que esta transición es vital para que la IA se convierta en una herramienta sostenible. Entre las recomendaciones para reducir el impacto ambiental de la IA destacan la virtualización de servidores y el uso de prácticas energéticamente eficientes en los centros de datos.
El debate que plantea la COP16 en torno a la IA y el cambio climático marca una nueva era en la relación entre tecnología y medioambiente. A medida que la humanidad enfrenta estos desafíos, la necesidad de encontrar un equilibrio sostenible se convierte en una prioridad. La COP16 en Cali es un hito que ofrece una ruta para enfrentar la crisis climática y la pérdida de biodiversidad de manera conjunta, con América Latina como una región clave en este esfuerzo global.