Acoso Sexual: Reflexiones y Acciones
El caso de Pedro Brieger es un recordatorio urgente de la importancia de implementar y hacer cumplir las normativas internacionales y nacionales contra la violencia y el acoso laboral. El Convenio 190 de la OIT y la Ley 26.485, qué ofrecen?
Pedro Brieger, reconocido periodista especializado en temas internacionales, ha sido recientemente señalado por múltiples testimonios de acoso sexual a lo largo de su carrera. Estos testimonios, recopilados por el periodista de Clarin Alejandro Alfie, en primera instancia, y luego profundizado por la Asociación Periodistas Argentinas (PA) abarcan más de dos décadas y revelan un patrón sistemático de comportamiento abusivo e intimidante. El informe de PA, Cultura del Acoso, Punto y Aparte, analiza los testimonios, la respuesta institucional y legal, y ofrece recomendaciones basadas en el Convenio 190 de la OIT y la Ley 26.485. Los testimonios recopilados por el colectivo Periodistas Argentinas destacan cómo Brieger se aprovechaba de la asimetría de poder, utilizando su posición y prestigio para perpetuar su comportamiento abusivo. Estos relatos subrayan la importancia de reconocer y actuar frente a las dinámicas de poder que facilitan el acoso y la violencia.
Contexto y Desarrollo de los Hechos
El primer caso conocido de acoso por parte de Brieger fue señalado públicamente en 2010 por la periodista Agustina Kämpfer. Sin embargo, no fue hasta una reciente publicación en X (anteriormente Twitter) por Alejandro Alfie que se dio a conocer la magnitud del problema. La investigación del colectivo Periodistas Argentinas documentó 19 testimonios de mujeres que fueron acosadas por Brieger entre 1995 y 2019.
El Convenio 190 de la OIT: Un marco legal contra la violencia y el acoso laboral
El acoso sexual en el ámbito laboral es una realidad persistente que afecta a muchas mujeres. Recientemente, se ha visibilizado un caso emblemático con los testimonios de acoso sexual por parte del periodista Pedro Brieger. Este tipo de situaciones no solo son moralmente reprobables, sino que también están contempladas y condenadas por el Convenio 190 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y la Ley 26.485 de protección integral contra la violencia hacia las mujeres.
El Convenio 190 de la OIT: Herramientas y Procedimientos
La ministra de Mujeres y Diversidades de la provincia de Buenos Aires, Estela Díaz, junto con la diputada de Unión por la Patria y presidenta de la comisión de Mujeres y Diversidades de la Cámara baja, Mónica Macha, subrayaron la importancia del Convenio 190 de la OIT durante la presentación de los testimonios contra Brieger. Este convenio, vigente en Argentina, proporciona un marco claro para abordar y gestionar casos de violencia y acoso laboral, promoviendo un entorno de trabajo seguro y digno.
La Necesidad de Voluntad Política y Social
“Es escalofriante escuchar sobre cuánta impunidad ha habido durante tantos años y cómo un comportamiento de acosador serial ha usado su prestigio para garantizarse impunidad”, reflexionó la ministra Díaz. Ella destacó que, aunque existen herramientas legales, se necesita voluntad política y social para que las instituciones adopten y apliquen estas normativas, cambiando prácticas arraigadas y construyendo una cultura de cero tolerancia al acoso.
Creación de Espacios Seguros para Denuncias
La diputada Macha enfatizó la construcción de espacios desde una lógica feminista, donde las denuncias puedan ser expresadas y atendidas, permitiendo así una acción reparadora para todas las víctimas. “Es fundamental que Brieger pida disculpas y asuma su responsabilidad por el daño causado a la vida y la salud física y psíquica de tantas mujeres”, añadió Macha
La Cultura del Silencio y la Naturalización del Acoso
El informe del colectivo Periodistas Argentinas resalta cómo la cultura del silencio y la naturalización del acoso permitieron que Brieger mantuviera su conducta sin consecuencias durante muchos años. La ministra Díaz remarcó la necesidad de transformar esta cultura, donde las instituciones y la sociedad en general deben asumir un rol activo en la prevención y sanción de estas conductas. El caso de Pedro Brieger es un recordatorio urgente de la importancia de implementar y hacer cumplir las normativas internacionales y nacionales contra la violencia y el acoso laboral. El Convenio 190 de la OIT y la Ley 26.485 ofrecen un marco robusto para proteger a las víctimas y sancionar a los perpetradores, pero su eficacia depende de la voluntad política, institucional y social para aplicarlos de manera efectiva. Solo así se podrá construir un entorno laboral seguro, respetuoso y equitativo para todas las personas.