COP28: Un hito en la lucha contra el cambio climático
Los países acuerdan transitar hacia otras fuentes de energía de forma justa y ordenada, pese a la resistencia de los grandes exportadores de petróleo y gas
Un acuerdo histórico
Después de una noche de intensas negociaciones en Dubái, los casi 200 países que participan en la cumbre del clima que se celebra en esta ciudad de Emiratos Árabes Unidos (EAU) han dado luz verde este miércoles a un acuerdo que marca un hito en la lucha contra el cambio climático: el compromiso de abandonar los combustibles fósiles, los principales causantes de la crisis climática.
El papel de Emiratos Árabes Unidos
El acuerdo se ha alcanzado a pesar de la fuerte oposición de algunos países altamente dependientes de las exportaciones de crudo, como Arabia Saudí e Irak, que han intentado diluir o eliminar las referencias a los combustibles fósiles. También se ha logrado gracias al liderazgo de Emiratos Árabes Unidos, un país en el que alrededor del 30% de sus ingresos proceden del petróleo y el gas, pero que ha demostrado su voluntad de impulsar una transición energética hacia fuentes más limpias y sostenibles.
La fórmula del consenso
El acuerdo pone el foco en los combustibles fósiles y los insta a transitar hacia otras fuentes de energía de forma justa, ordenada y equitativa, acelerando las acciones en esta década crítica, con el objetivo de alcanzar el cero neto de emisiones para 2050. Esta es la fórmula que ha permitido el consenso entre los países, tras descartar otras opciones más contundentes, como eliminar progresivamente o reducir el uso y la producción de estos combustibles.
El papel de la Unión Europea y los movimientos ecologistas
La inclusión de estas menciones directas a los combustibles fósiles era una de las principales demandas de los países más ambiciosos en materia climática, entre los que destaca la Unión Europea, que ha jugado un papel clave en las negociaciones. También era una de las reivindicaciones de los movimientos ecologistas y sociales, que llevan años denunciando la influencia de las grandes corporaciones petroleras y gasísticas en las políticas climáticas.
Avance respecto a Glasgow
El acuerdo de Dubái supone un avance respecto al de Glasgow de 2021, que ya introdujo por primera vez la idea de reducir las emisiones de metano, un potente gas de efecto invernadero asociado al gas natural. Sin embargo, el texto de la COP28 va más allá y reconoce la necesidad de dejar atrás los combustibles fósiles como una condición indispensable para limitar el aumento de la temperatura global a 1,5 grados, el objetivo del Acuerdo de París de 2015.
Otros aspectos relevantes del acuerdo
El acuerdo también recoge otros aspectos relevantes para la acción climática, como el aumento de la ambición de los planes nacionales de reducción de emisiones, el apoyo financiero a los países en desarrollo, la adaptación a los impactos del cambio climático, la protección de los derechos humanos y la participación de la sociedad civil. Además, se establece un mecanismo para revisar periódicamente el progreso de los países y se fija la próxima cumbre del clima, la COP29, en Sudáfrica en 2024.